jueves, 9 de noviembre de 2017

La Vid: arte histórico en la Ribera


Fundación Caja Rural Burgos.


El monasterio de La Vid

A tan solo siete kilómetros de Peñaranda de Duero está La Vid, con su monasterio, que se me antoja de ineludible visita seas o no «de esa cofradía». La abadía original tiene como fecha fundacional el año 1152, aunque apenas quedan elementos arquitectónicos de esa primera construcción.
Al exterior, el monasterio llama la atención por su magnífica espadaña, su sólido volumen y los jardines que lo rodean; y en el interior, la capilla mayor (costeada por el cardenal Íñigo López de Mendoza y su hermano, el ya citado don Francisco de Zúñiga y Avellaneda) es un joyero renacentista de exquisita decoración que sirve de contenedor a una de las imágenes más bellas de la Virgen que haya visto jamás. La «tapa» es una cúpula en forma de concha, en la que los angelotes recogen un velo tras el cual un rey quiso un día esconderla, para que su beldad no distrajera a los presentes durante su rezo. Pero vano intento este del monarca, porque el velo original se rasgó sin motivo aparente y el rostro de la Virgen volvió a quedar al descubierto, para maravilla y contemplación de las generaciones futuras.
En la actualidad, el monasterio (erigido en un lugar de recreo del rey Alfonso VII que destacaba «por las frondosas y abundantes vides que aquí se cultivaban») sigue siendo casa de espiritualidad, aunque también está abierto al turismo como hospedería (mixta) y albergue. Y es que no es de extrañar, que en un mundo tan ruidoso y tan desconectado de sí mismo como el actual, en el que el hombre se ha desprendido voluntariamente de todo aquello que le servía de soporte, cada vez más personas busquen (o busquemos) la paz interior y el sosiego vital en espacios de silencio y naturaleza como los que ofrece La Vid.

Mas turismo en La Vid

Pero si, como os decía, no profesáis en esta cofradía, siempre podéis acercaros a esta población para visitar su famosa bodega. Otra opción es iniciar desde aquí el GR 14 que tras 19 km de caminata o de paseo en bicicleta os llevará hasta Aranda de Duero. En cualquier caso, y con esta nueva cita termino, «cuando el camino que se debe tomar es claro y seguro y la disposición de ánimo serena, lo bueno [para uno] se elige sin vacilaciones».

No hay comentarios: